Bon Appetite!

              La gente siempre ha relacionado comida y sexo. A los órganos sexuales se les suelen llamar con nombre de alimentos e incluso hay alimentos que ayudan a producir deseo sexual: los llamados afrodisíacos. La nata, el chocolate, las fresas, las ostras y muchas comidas tienen el don de ponernos tontillos e imaginar situaciones sexuales. Supongo que su aroma, dulzura, gusto o tacto hacen que en nuestra mente se encienda la llama del deseo. No es extraño por ello que muchas películas eróticas o pornográficas empiecen con una cena. Mejor dicho, prácticamente todas las relaciones sexuales empiezan con dos personas compartiendo una mesa.

                Gracias a este saber tan conocido las empresas de marketing llevan unos años creando las diferentes páginas de restaurantes baratos, ofertas, o menús para parejas que quieren empezar por los preliminares y no se pueden gastar mucho dinero. Estas páginas son aliadas de otras cómo "Adopta un tio.com", "Badoo", "Meeting"... Infinidad de opciones para conocer gente e "ir a cenar". Yo, he tenido la suerte o la desgracia de probar muchas de esas páginas. El funcionamiento siendo chica es muy sencillo: buscas a un tío que tenga las mismas aficiones que tu y os escribís. Depende de ambos (o eso os hacemos creer) tardáis unos días o unas semanas en conoceros. Nosotras, prepararemos esa cita al milímetro, ya que para las mujeres que te causen una primera impresión buena puede ser decisiva. Los hombres en eso son diferentes; normalmente no sueles encontrar en esta página Adonis o tíos que podrían pasar por modelos y si los encuentras suelen querer una tía de cuerpo perfecto y mente vacía. Para el resto de los hombres las primeras impresiones no os marcan tanto y es que si la chica es monina, maja, o pasable ya os vale, porque vuestro objetivo en la primera cita es el sexo. Para la mayoría de los tíos "ir a cenar" es un auténtico preliminar: "follar".  

                   Y es que amigas mías, os voy a revelar el secreto que creo que a los treinta una mujer debe saber. Delante de una cena, ellos siempre, siempre esperan sexo. Así que es absurdo que os enfadéis si no os vuelven a llamar, que les digáis "cerdos cabrones, ¡sólo quería eso de mí!" Sí, en la primera cita sólo quieren eso de vosotras. El hombre, es el animal más práctico que conozco; casi, casi más práctico que mi Ipad. Y se mueve por las siguientes fases: 

                         

                          En la primera cita: sexo

                      Tú puedes crear un look sexy (porque a todas nos gusta que nos vean guapas), sexy tirando a elegante; vamos lo que la revista Vogue describe como perfecto. (Si llevas escote, no lleves mini y si llevas shorts no lleves top) Eliges un vestido de palabra de honor negro que llega hasta la rodilla con unos taconazos de colores. Maquillaje suave y abrigo ligero. Por mucho que Vogue diga que vas perfecta; bueno Vogue y cincuenta amigas más ya que tus dudas te hacen enviar fotos a todas para que opinen, tú aún no lo tenes claro. Llegas al sitio indicado y ves a un guapo moreno y lo único que piensas es: "¡qué guapo!¿no será gay?". Si no es gay, ¿sabes qué piensa él?: "buah está cañón. Y lleva un vestido que se saca rápido, jajaja" Y a partir de ese momento hagas lo que hagas no dejará de pensar en sexo.

                               Fase dos: prisa por llevarte a su cama

                       Podéis ir a cenar, ir a tomar algo después, incluso ir a bailar. Puedes hablar de tu trabajo, de tus relaciones, de tus proyectos, de tus libros o música favorita, de que sabes de literatura japonesa... Puedes decir las cosas más irónicas o impactantes del mundo que no te... No voy a decir que no te escuchará pero diré que te escuchará a medias. Porque con un lado del cerebro aún estará pensando si llevas sujetador debajo del vestido. Mi consejo: tíratelo. Si te gusta el chico en cuestión no hace falta esperar a la tercera o cuarta cita como hacían nuestros padres. Pasáis un buen rato en su casa y estoy convencida que si tus labios le hacen una buena mamada será tuyo para siempre.

                               En mi opinión el sexo en la primera cita lo facilita todo. Si no te vuelve a llamar, ya sabías que sólo quería eso y te intentas olvidar de ese tío cuánto antes. Si te vuelve a llamar, sabes perfectamente que no es para acostarse contigo ya que eso ya lo ha hecho, es por tu magnífica inteligencia y tu increíble sentido del humor. Aunque lo importante es ser tú misma. Si tú no eres de las de sexo en la primera cita, que se aguante y que espere. Para mí lo importante del sexo es hacerlo tranquila y disfrutando. Yo personalmente lo doy todo, está claro que la confianza es una ventaja y quizás la primera vez no encuentra muy bien tu punto o tú el suyo; que aunque parezcan iguales cada uno tiene sus cosas. Hay quien le gusta que le aprieten en la base del pene, hay quien le gusta que cuando les haces una mamada su puntita toque tu paladar. Como veis cada chico es un mundo. Otra cosa que muchas no hacen es: quejarse. Son capaces de estar allí treinta minutos sin sentir nada y no decirle al chaval: "perdona, mi clítoris está cinco centímetros más para arriba" Hay que hablar y decir las cosas claras.                              

                                       En el caso que todo haya ido sobre ruedas al día siguiente mientras esperas tranquilamente que te traiga el desayuno, porque te lo traerá, le puedes hablar de lo que quieras. De comunismo, de todas las "mujercitas", de lo injusto que es que se muera leo dicaprio en titanic y de todos tus proyectos secretos en los cuales sólo necesitas la módica cantidad de tres cientos mil euros. Porque ahora él está relajado, es todo oídos y verá que después de un orgasmo tan increíble hay una mujer más increíble aún. Si le gustas y ha disfrutado contigo, se mostrará como es él, te hablará de su equipo de fútbol, de su trabajo, de sus sueños y quizás te enseñe fotos hasta de su viaje a Padova cuando fue de Erasmus. 

                              Fase tres: el futuro que sea claro.

                             Cómo sabéis los tíos tienen una especie de fobia al futuro. Para nosotras en cambio es necesario saber qué pasará con ese hombre maravilloso. Las opciones son infinitas pero siempre hay que hablar mucho de estas cosas. Hay hombres, bueno diremos personas, que sólo quieren una relación esporádica; (éso hay que decirlo) sí o sí, aunque os cueste, porque si no, hacéis sufrir a las personas sin motivo alguno y los hombres... bueno volveré a decir las personas, a veces son muy cobardes. Puede que sólo queráis sexo esporádico, o una relación abierta, o sólo queríais un polvo de una noche porque tenéis pareja, o quizás busquéis una pareja estable... Lo importante es hablar mucho. Las cosas claras son las mejores. Yo he dicho muchas veces "No estoy buscando una relación estable" o "sólo quiero un polvo porque he roto con mi novio y quiero que me hagan sentir bonita". Son miles de situaciones en las que el ser humano necesita sexo. Así que no juzguéis y no os enfadéis porque un chico no os llama para una segunda cita. Hacer clic en cualquier página de contactos y tendréis a vuestros pies a cientos de chicos que quieren "ir a cenar con vosotras."

                          

                                Para acabar un último consejo: no finjáis. Las citas, el sexo, las comidas, "las comidas" están hechas para disfrutar. Somos adultos para decidir qué menú escogemos hoy y os aseguro que el bufe es muy variado. Por favor no os sentáis obligadas a nada. Si el chico en cuestión no lo hace bien, quizás le puedas enseñar, si habéis ido a cenar e incluso te ha invitado no te sientas obligada a acostarte con él y lo más importante: recuerda que estamos en el siglo XXI somos libres, maravillosas y ya casi no necesitamos a un hombre ni para engendrar un hijo, así que no estés a régimen y haz lo que te apetezca para cenar.